miércoles, 11 de marzo de 2009

¿cómo has aparecido ante mí?

Tengo mi cuerpo lleno de ecos de vos...

y ahora todas mis derivaciones
mis azules delfines
están regocijados con tu venida

y desde que apareciste
todo lo que es mío y me pertenece
esperan cada día poder verte

para que me ilumines las mañanas
y me despierte los viernes al sol
y me acompañes en la sutil tristeza del domingo

Y seguir construyendo
cada pequeño minuto a tu lado
algo pletórico
rebosante.

miércoles, 4 de marzo de 2009

Ten cuidado cuando dejes de amarme...

Tus tiempos ya no son mis tiempos, la constelación de estrellas alineada ya no la veo desde mi ventana, tus ojos ya no son fondos de océano, tus manos ya no son extensión de mis deseos y tu aroma ya no baña mi cuerpo.

Ten cuidado cuando dejes de amarme, aún si lo haces solo por un tiempo, porque mi tiempo también avanza, porque mi tiempo no tiene otro ritmo más que el de las horas sin verte, los días, los años sin verte y que transcurren, que suman, que calman y apagan mi deseo por estar contigo.

Ten cuidado cuando dejes de amarme, porque no podrás volver a casa sin encontrar un mueble nuevo, una puerta echada abajo, las ventanas abiertas, las paredes pintadas y tus cosas olvidadas.

Por eso, cuando dejes de amarme, ten cuidado, hazlo de manera implacable, hazlo de forma irreversible, haz mi nombre impronunciable, porque cuando vuelvas, ya no estaré esperando a que toques a la puerta, ya no estaré buscándome en tus ojos ni en tus palabras pero sobre todo ya no te llamaré una sola vez a la cama, para leerte un cuento, para acariciar tu pelo, para arroparte con mis piernas, para que germine en mí un retrato de nuestro cariño, porque mi amor, también ya habrá muerto.

domingo, 1 de marzo de 2009

¿A quién afecta tu encierro?

Te afecta a tí que estas ahí en medio de la podredumbre sin poder sentarte tan siquiera y con lo único que hacer que esperar a que llegue a dejarte algo para comer? a esperar a que llegue para poder charlar un rato que como están los niños, que ellos están bien pero preguntan por vos, que ¿hablaste a la oficina?, ¿al abogado? ¿a mi mamá?, ¿y qué te dijo?, que ojala que aprendas y que mañana no sé si podré venir a verte y ¿te aguantas un tiempo no comer?, que creo que sí, que me traes más agua, que me traes un libro para mientras leo y mientras tanto tu cerebro repasa el momento que el policía te detuvo y te estacionaste y salgase por favor, lamento informarle que tendrá que ser detenido, nos llevaremos su carro y tu tu tu tu . Aló qué pasó?
ya voy para allá...

Porque la vida es un sueño y los sueños, sueños son y todo lo que nos está pasando es producto de mi imaginación, y yo me lo he inventado todo y ustedes son mis personajes de esta historia que ahora cuento y no es posible que esto sea real y mi mente es tan poderosa que puede atraer hacia mí aquello que le dedico mis pensamientos, no solo aquello que deseo con todas mis fuerzas sino aquello que ocupa un tiempo frecuente dentro de mi cabeza ya sea consciente o inconscientemente

Pero no puede ser así, hay cosas que uno no las desea, hay accidentes, muertes, que uno no las desea y pasan, hay desgracias todos los días, pero no es que las desees es que has pensado en ellas y mi mente es poderosa y antes los dos teníamos esa gran conexión.

Acaso fue tu subconsciente el que ocasionó este incidente, acaso fue tu subconsciente el que hizo que me tardara más de lo normal en salir de ese parqueo, en buscar el disco que quería oír, en no dejar pasar el carro que venía detrás mío y no doblar en la calle de siempre y seguir por el mismo camino e ir a 60 kms x hora . No sé …

Me afecta también a mí, porque yo me quedo en la casa yo resuelvo el problema, yo te busco a un abogado, le hablo a tu jefe, miento por vos, me salgo de la oficina más temprano, voy todos los días a buscarte y a dejarte algo para comer, regreso, sigo trabajando, preparo la cena, preparo tus tres tiempos de comida cada día y me siento tan cansada, quiero descansar, quiero que termine esta agobiante rutina y lloro cada noche y quisiera retroceder el tiempo pero veo a mis hijos y me llenan de fuerza y por ellos todos y por vos todo.

Me afecta también a mí porque no te tengo porque me quedo sola, porque no dormís conmigo, porque no siento el peso de tu cuerpo sobre mí porque no me veo en tus ojos, porque no escucho tu vos, porque no siento tus manos en mi espalda, en mis piernas y en mis deseos.
Porque estás ahí, encerrado, rodeado de podredumbre, pagando una pequeña condena que ha sido el producto de miles de tiempos y de las casualidades.

Pudiera definir mi vida uniendo casualidades